domingo, enero 04, 2009

Incondicional

Empezó un año, y depende de la actitud de cada quién el como se desarrolle este año.
El viernes pasado, un proverbio me motivó a seguir desarrollando las actitudes personales. "El alma perezosa desea y nada alcanza; mas el alma diligente será prosperada". Si uno quiere obtener cosas, tiene que trabajar, si uno desea llegar a un sitio, tiene que ir hacia allá, no hay otra, no hay atajos, no hay otros métodos. Hay que cruzar ríos, atravesar puentes, pero hay que trabajar, de otra manera es imposible obtener lo que uno desea.

Incondicional, a pesar de lo que pase este año, incondicional, a pesar de que las cosas no resulten como uno espera, incondicional, aunque este año no sea el gran año, o el año de las sorpresas, o el año que uno esperaba, el año donde encontraría todas esas cosas deseadas y esquivas, para mi por lo menos. Incondicional a pesar de todo. Ser fiel y constante a Dios a pesar de que este año no pase nada de lo que yo tanto espero y anhelo, incondicional a Dios a pesar de que este año nuevamente me toque llorar y ver como otros botan migas de su mesa, incondicional aunque sienta que Dios me ha dejado de lado en algunos aspectos, y que nunca a mi se me dan las cosas, incondicional a Dios aunque parezca que lo único que hago es quejarme. Incondicional. Ser incondicional es una actitud que necesita ser entrenada. Cuesta, pero hay que trabajarla. Si hubiese que llorar nuevamente este año, si hubiese que ver cosas que uno no quisiera ver, si hubiesen verdades y situaciones que uno quisiese ignorar, hay que seguir adelante, hay que ser incondicional a Dios, porque Él lo ha sido siempre.

Aunque las personas a quienes queremos o tenemos algún tipo de ligadura no son recíprocos en nada, con Dios debemos serlo, serle incondicional... Siempre...


"El alma del perezoso desea y nada alcanza; mas el alma del diligente será prosperada!"